Cada año, el diseño del canguro cambia, lo que convierte a estas monedas en piezas muy apreciadas tanto por inversores como por coleccionistas. El anverso presenta el retrato del Rey Carlos III, otorgándole estatus de moneda de curso legal.
La versión de 1/2 oz ofrece un equilibrio perfecto entre inversión accesible y valor intrínseco, siendo ideal para diversificar carteras patrimoniales y resguardar ahorros frente a la inflación.