Cada año, el reverso de la Panda cambia, convirtiéndola en una opción muy atractiva para coleccionistas y entusiastas del diseño. La edición 2025 no es la excepción: presenta un nuevo retrato del panda gigante, símbolo de armonía y naturaleza, convirtiendo esta pieza en una fusión de valor artístico y patrimonial.
Gracias a su tamaño y pureza, es ideal tanto para quienes desean diversificar su patrimonio como para quienes buscan una moneda estéticamente cuidada con alto valor de reventa. La Panda de 30g goza de gran liquidez y se considera una de las monedas de oro más respetadas del mundo.