Acuñada en oro fino 999.9 (24 quilates) y con un diseño anual renovado del emblemático canguro australiano, esta pieza ofrece gran valor estético y liquidez en los mercados de metales preciosos. El anverso presenta el retrato de la Reina Isabel II, reafirmando su carácter oficial como moneda de curso legal en Australia.
Gracias a su peso intermedio, la versión de 1/2 oz permite mayor flexibilidad de inversión frente a monedas más grandes, manteniendo al mismo tiempo el prestigio de una emisión limitada de la Perth Mint.