Su anverso presenta una representación de instrumentos musicales clásicos incluyendo el violonchelo, violines, trompa y arpa mientras que el reverso muestra el gran órgano de la Sala Dorada del Musikverein, uno de los auditorios más famosos del mundo.
Esta moneda no solo es una opción atractiva para coleccionistas y amantes de la música clásica, sino también una elección sólida para inversores que buscan seguridad, liquidez y reconocimiento global en sus activos en metales preciosos.